Para Bernardo y María Isabel, ejemplo y esperanza
El sistema de justicia del
Estado-empresa guatemalteco opera con precisión matemática, mecanismo de
relojería que no se detiene y regresa, claro, a los mismos lugares: justicia
pronta, eficaz y cumplida contra defensorxs de derechos; ambigüedad y dilaciones
cuando se trata de investigar a políticos corruptos, a los que desvían ríos o desarrollan proyectos
sin consulta previa (eternas esperas hasta que a alguien se le ocurra
certificar lo conducente).